Una mujer llegó ayer a un centro asistencial con un fuerte sangrado. Se había colocado en la vagina permanganato, un potente oxidante que se utiliza para abortar. El caso se dio a pesar que desde hace dos días está en vigencia la ley que obliga a todos los centros de salud públicos y privados del país a ofrecer atención a mujeres que deseen interrumpir su embarazo.
La coordinadora del Programa de Salud Sexual y Reproductiva, Leticia Rieppi contó a EL PAÍS digital que hubo que sacarle la pastilla, inhibir el sangrado y hacer el lavado. Explicó que el químico provoca una especie de úlcera en la vagina y que su venta está prohibida en Uruguay desde el año pasado cuando el Ministerio de Salud Pública detectó que estaba siendo utilizado como abortivo. «Voy a iniciar una investigación porque el permanganato está prohibido en Uruguay», afirmó.
La mujer dijo conocer la ley pero aseguró que no asistió a ningún centro asistencia porque «le dio vergüenza». Rieppi afirmó que esta ley debe «luchar con muchas cosas» y advirtió que las mujeres pueden seguir eligiendo la ilegalidad. «Contra eso hay que pelear», aseguró.
En Uruguay han muerto muchas mujeres por el uso de ese químico.
Fuente: Diario El País