MYSU (Mujer y Salud en Uruguay) presenta hoy un relevamiento realizado en Maldonado en cuanto a la situación sobre la salud sexual y reproductiva. Lilián Abracinskas y la licenciada Maru Casanova dijeron a FM Gente que se detectó que este departamento que hay “luces” y también “sombras”, entre la que situaron la reciente muerte de la mujer que se realizó un aborto clandestino en Florida.
El estudio se realizó a través de un cuestionario y de entrevistas a distintos prestadores, actores y usuarios del sistema de salud. Abracinskas destacó que en los resultados se observan “luces y sombras”.
“La luz es que los servicios existen, están disponibles”, señaló. Y entre las “sombras” señaló que Maldonado tiene “las dos complicaciones que se han registrado cuando ya se aprobó la ley de interrupción voluntaria del embarazo, que son: el procesamiento con prisión de una mujer por haberse realizado un aborto fuera de los plazos estipulados y recientemente el triste y lamentable fallecimiento de una mujer joven de 21 años, que muere por la realización de un aborto en el sistema clandestino”.
Dijo que por eso es importante que hayan respondido a esta convocatoria las autoridades departamentales de la salud, los prestadores y las instituciones privadas.
Destacó que hay situaciones en el departamento que deben ser subsanadas. “La gente aún no sabe los derechos constituidos, los plazos y cuándo el aborto en este país no es penado y cuando sí”, señaló. “Y si se realiza fuera del sistema de salud, es delito siempre. De la misma manera que, si se pasa el plazo de 12 semanas, hay problemas”, resaltó.
Explicó que el aborto, en el segundo trimestre del embarazo está previsto por ley, cuando hay malformación o riesgo de salud de la mujer. “pero como ha quedado demostrado con el fallecimiento de esta mujer, estos abortos se resuelven en el sistema clandestino y, lamentablemente, en las peores condiciones”, agregó.
Casanova dijo que el estudio también buscó identificar las barreras para el acceso a los servicios, no solamente para aborto. “Identificamos dificultades en la difusión de los servicios de interrupción voluntario del embarazo y no hay una política de los prestadores de difundirlos”, señaló.
Se indicó se comprueba que, en Maldonado, las cifras de interrupción voluntaria de embarazo vienen en alza, en la medida que se conoce más la ley, aunque el número aún el bajo, ya que por las respuestas que obtuvieron se ubica en el entorno de los 300 casos por año.
Casanova dijo que no todos los prestadores respondieron a esa consulta sobre la cantidad de interrupciones voluntarias de embarazo. “Entre los que nos respondieron está el hospital de San Carlos, que presenta los números más bajos… con 30 en 2014. Luego, en ASSE, la RAP nos respondieron, hay 170 en 2014 y en el primer semestre de 2015 ya superaba los 200. Y en el Mautone ronda los 100, 150 anuales”.
“No llega a 500” en todo el departamento, apuntó Abracinskas. “Estamos en 250, 300. Ha habido un incremento, pero el número sigue siendo bajo. Tengan en cuenta que Maldonado tiene el mayor porcentaje de mujeres en edad reproductiva en comparación a cualquier otro departamento del país… Pero además estamos todavía muy lejos de las cifras estimadas antes del cambio legal”, indicó.
“Es auspicioso que más mujeres que se enfrentan a situaciones de embarazos no deseados recurran al sistema y que el sistema vaya registrando, año a año, mayores prestaciones. Porque si no podría hacer la hipótesis de que el sistema clandestino sigue teniendo un mercado importante. Y, lo que hay que combatir, es eso”, resaltó.
Fuente: FM GENTE