En una jornada Nacional sobre Salud Sexual y Reproductiva, organizada por Mujer y Salud en Uruguay (MYSU) y el Departamento de Género y Diversidad del PIT-CNT, se analizó el estado de implementación y funcionamiento de los servicios de salud sexual y reproductiva en los prestadores del Sistema Nacional Integrado de Salud, obligatorios desde enero de 2011, de acuerdo a lo dispuesto por el Decreto 293 de 2010, que reglamenta la Ley 18.426 de diciembre de 2008.
Según datos de la Junta Nacional de Salud del Ministerio de Salud Pública, a fines del 2011 algo más del 60% de los prestadores cumplían completamente con las normas vigentes. Pero el monitoreo realizado por el Observatorio Nacional de Género y Salud Sexual y Reproductiva que gestiona MYSU, revela que menos de un tercio de la población usuaria conocía la existencia de servicios específicos y las prestaciones a las que tiene derecho.
En la jornada sobre salud sexual y reproductiva, que contó con el apoyo del Fondo de Población de Naciones Unidas (PNUD), ONU Mujeres, Organizaciones Panamericana de la Salud y Mundial de la Salud (OPS/OMS) y Médicos del Mundo-Francia, participaron alrededor de 200 mujeres provenientes de diferentes departamentos y localidades del país, que volcaron al colectivo sus percepciones locales sobre el tema.
Ante ese auditorio, Luis Gallo, presidente de la Junta Nacional de Salud que administra el Seguro Nacional de Salud, reconoció dificultades en la implementación de los servicios en los términos del Decreto 293/010: “No hay acostumbramiento de los prestadores a brindar de la forma estipulada los servicios de salud sexual y reproductiva y tampoco de los usuarios”.
En 2010 se empezó a trabajar en la conformación de los equipos de referencia que deben articular los servicios ya existentes y orientar su funcionamiento. En el monitoreo de 2011 se encontró, por ejemplo, que todavía no había ningún servicio en funcionamiento en el departamento de Artigas. “El monitoreo sirvió para averiguar por qué y empezar a crearlos tanto a nivel privado como público. Las mayores dificultades que los servicios marcaron fue trabajar la confidencialidad, luego la sexualidad, después la diversidad y por último los embarazos no deseados”, explicó el jerarca.
No obstante, también se confirmó que en el 63% de los prestadores privados, esos equipos estaban constituidos en forma reglamentaria, el resto “como podían, de acuerdo a la logística del lugar”, al decir de Gallo.
La entrega de métodos anticonceptivos se realiza en el 100% de las instituciones, pero solo el 47% utiliza las cuponeras para el retiro continuado de anticonceptivos orales, de emergencia y condones. Gallo anunció que desde el mes en curso la colocación del Dispositivo Intrauterino (DIU) tendrá un mínimo costo para las usuarias, en lugar del costo del acto médico que reclamaban los prestadores.
Otros datos resultantes del monitoreo mostraron que el 93% de las consultas en los servicios de salud sexual y reproductiva son por embarazos no deseados y el 38% sobre sexualidad.
A partir del 1ro.de noviembre de 2011 estarán incluidas entre las prestaciones obligatorias del Sistema Nacional Integrado de Salud la ligadura tubaria y la vasectomía.
Gallo reconoce que “el personal técnico no sabe transmitir derechos, se necesita a los usuarios para mejorar las instituciones”.
Conocer para ejercer
El monitoreo paralelo realizado en 2011 por el Observadorio Nacional en Género y Salud Sexual y Reproductiva que gestiona MYSU, confirma las dificultades esbozadas por Gallo.
Si bien los resultados finales se están procesando, en la jornada se adelantaron tres conclusiones: el 58% de las mujeres que usan métodos anticonceptivos los compran en farmacias y no en los servicios de salud, igual que en 2005; solo el 27% de las mujeres reconocen haber acudido a los servicios de salud sexual y reproductiva de las instituciones y lo hicieron por métodos anticonceptivos, violencia, sexualidad y abortos; fuera de este 27% consciente e informado, las que van a consulta ginecológica ignoran que hay servicios creados especialmente, lo que habla de que el personal de salud no las asesora debidamente.
Material de divulgación
MYSU presentó durante la jornada un material de divulgación consistente en un folleto, que apunta a describir didácticamente los derechos de las y los usuarios en materia de salud sexual y reproductiva. Al efecto, enuncia en general esos derechos y las responsabilidades de las instituciones, para pasar luego revista a los mismos según materia y etapas: anticoncepción, embarazo, parto, embarazo no esperado, cáncer génito-mamario, climaterio y menopausia, violencia, infecciones de transmisión sexual, atención de adolescentes.
Para que no queden dudas, el folleto arranca con la siguiente declaración: “Mujeres y hombres de todas las edades y condiciones tienen el derecho a acceder a información y a educación no sexista ni discriminatoria, a ser respetados en sus decisiones reproductivas y en sus diversidades sexuales, a contar con servicios integrales y a recibir una atención humanizada y de calidad”.
Además de ese material, MYSU elaboró una serie de spots que apuntan a la misma información, destinados a los medios de comunicación audiovisuales.
Fuente: La República de las Mujeres, 26 de agosto 2012